El deporte sedentario

En todos los comienzos del verano se produce en los parques una aglomeración de personas haciendo ejercicio. Esto es lo que comunmente llamamos operación bikini, y es una medida urgente por la cual el cuerpo pierde unos kilos de más. Esto deja en evidencia una de las cualidades del ejercicio físico, la perdida de grasas, pero no es la única.
Durante el ejercicio se pierden calorías, toxinas, tensiones y se liberan endorfinas ( la hormona de la felicidad), y hay otras cualidades que potencian el ejercicio , como el espíritu de superación, el trabajo en grupo o la solución de problemas.
Si bien es cierto que hacer deporte está condicionado en muchas ocasiones al tipo de clima o a las instalaciones o condiciones naturales del suelo en que vivimos, hay tanta variedad, deportes de verano y de invierno que no hay excusa para no practicar alguna de las miles de actividades deportivas.
Sobre todo hay que tener en cuenta que somos animales, tenemos musculatura que para estar óptima necesita de un desarrollo, debemos ejercitarla para evitar la sensación de cansancio que produce el no hacer nada, acomodandonos en el sedentarismo del coche o estar sentados durante horas en un trabajo.
¿Es nuestra vida insana? Parece que el funcionamiento social exige un nivel de desplazamiento cómodo que no nos desgaste y poder así rentabilizar nuestros esfuerzos en base a la productividad, con la consiguiente ausencia de esfuerzo nuestro cuerpo se acomoda en la pasividad. La falta de ejercicio y la comida grasienta aumentan considerablemente el nivel de enfermedades cardiovasculares. Ya no es extraño ver a niños celebrar su cumpleaños en el Mcdonals, que parece ser el premio, la promesa hecha a unos niños a los que sus propios padres estan dilapidando a una vida adulta con problemas de obesidad, colesterol o enfermedades cardiacas.
¿Es la comida rápida un veneno incoloro?, ¿nos está matando el Mcdonals poco a poco?
No ha habido nunca tanta obesidad infantil, niños productos de una filosofía de vida que parece ser a bombo y platillo el modelo a seguir.
Mientras tanto, en las ciudades sigue el ritmo frenético de siempre, y a veces nos hacen pequeños parques esperpénticos que nos recuerdan a la naturaleza humana, que una vez utilizó el ejercicio para sobrevivir en frondosas selvas y que ahora para sobrevivir lo desprecia.
Quizás sea un suicidio colectivo de individuos que mueren por una causa justa, su sociedad. Puede ser que en torno a todo esto nos invada un amor colectivo en el cual prime el funcionamiento social en detrimento de la salud individual.Puede ser que sea un comportamiento encubierto por el cual nosotros preferimos cansarnos en el trabajo y no en el deporte para así prosperar.
Seguiremos con nuestro devenir y usaremos el cuerpo para el fín que justifica nuestra existencia, y continuaremos con pausada destreza, destruyendo la naturaleza para asegurar el futuro de nuestra incierta descendencia.